A estas alturas, lo más probable que todos ya hayan escuchado hablar sobre “Bajo la misma estrella” ya sea por su versión inicial en libro, o por la película que fue estrenada hace unas semanas en nuestro país y que ya posee un record de audiencias, superando a clásicos como Titanic o Crepúsculo.
La cuarta novela de John Green, de 36 años, fue publicada a comienzos del 2012, manteniéndose durante 78 semanas en la lista de superventas del New York Times y siendo traducida a 46 idiomas. El drama romántico, es relatado por Hazel Grace, una joven de 16 años, que posee un Cáncer de Tiroides en etapa IV y que conoce en un centro de apoyo a enfermos terminales, a Agustín Waters, un adolescente que perdió una pierna producto de su Osteosarcoma.
A pesar de que en una primera instancia, la historia pareciera ser un drama de enfermos terminales, la cualidad de este libro, y su versión cinematográfica, es que va mucho más allá de la enfermedad, adentrándose en cómo puede surgir el amor adolescente bajo condiciones tan adversas, con la muerte, como una espectadora constante y con un particular humor negro.
La película “Bajo la misma estrella”, fue estrenada el pasado 12 de junio en nuestro país, un poco más de dos años después de su lanzamiento bibliográfico, consiguiendo ser el debut más visto en lo que va del 2014 en Chile y recaudando cerca de 48 millones de dólares en su primer fin de semana en Estados Unidos.
La novela, ha alcanzado gran popularidad entre los adolescentes, eso queda en evidencia al asistir al cine, y ver cómo los espectadores –mayormente quinceañeros- anticipan cada momento de la película entre comentarios y suspiros. Un punto importante a destacar en el film, es la gran fidelidad que mantiene la historia y descripción de personajes, en relación a su versión original, situación que pocas veces sucede, y que los lectores agradecen.
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